domingo, 30 de octubre de 2011

DESADAPTACIÓN,EXCLUSIÓN, MARGINACIÓN Y POBREZA.

La inadaptación según Guash y Ponce es un desequilibrio entre el individuo y la sociedad, entre el individuo y el medio.
Sin embargo, según Ayerbe la inadaptación es  un desajuste provocado por la inadecuada utilización de los elementos del mundo circundante, por la falta de participación activa y constructiva en el grupo social, por las dificultades para vivir en sociedad, por la pertenencia y participación en un grupo con finalidades alejadas de las actividades constructivas, por la ausencia de elementos materiales e inmateriales y por la marginación.
Partiendo de esto, podemos decir que todos hemos estado desadaptados alguna vez en nuestra vida. Por ejemplo, en la adolescencia que es una etapa crítica. Pero cuando necesitamos ayuda para salir de un problema se le considerará desadaptación en sí misma. Los desadaptados son los que la sociedad considera desadaptados ya que hay personas que tienen muchas desgracias y, sin embargo, están perfectamente integradas (tener algunos factores no implica estar excluido).
Por otro lado, debemos estar abiertos a la ayuda que se nos ofrece porque, de lo contrario, empezaremos a encasillarnos en el problema y cada vez es más difícil salir de él. Se produce el efecto bola de nieve. Otro ejemplo del efecto bola de nieve es la distribución de los hogares en función de la capacidad económica de cada uno: tendemos a situar en una zona aislada a los pobres y en otra zona distinta a los ricos. Esto propicia más marginación y menos posibilidades de salir de ella. Nos ayuda a comprender la diferencia entre desadaptación y marginación.
La exclusión sería el último paso: separan al grupo marginal de toda la sociedad y lo aíslan. Es un proceso social del individuo o grupo respecto a las posibilidades laborales, económicas, políticas y culturales a los que otros sí tienen acceso.
Por ejemplo, no todos podemos acceder a un hotel de lujo, estoy excluido porque no tengo capacidades económicas para acceder a ese tipo de vida. Los procesos de exclusión son mucho más sutiles que te señalen con el dedo por ser negro, van más allá dependen de muchos más factores.
Otro ejemplo es el de acceder a un trabajo en el SAMUR, para ser bombero o en una ONG. Aunque oficialmente pueda acceder a estos trabajos cualquiera, accederá antes el que ha sido voluntario o el que tiene familia trabajando en esa institución que el que viene de fuera.
Todas las personas no tenemos el mismo acceso a los recursos que oferta la sociedad porque no todos estamos educados de la misma manera ni tenemos la misma historia de vida. Nuestro trabajo como educadores sociales  es averiguar las causas de esta actitud y de la capacidad de acceso a los recursos existentes.
La pobreza.
Amartya Sen afirma que la pobreza no debe medirse sólo en el acceso a bienes materiales que tienen las personas sino hay que medir también la capacidad de utilizarlos eficazmente, que les permita ser libres para procurarse su bienestar.
Creo que esta autora lleva toda la razón ya que los recursos que no son utilizados eficazmente son desperdiciados y, aunque los tengan, si no los saben utilizar bien es como si no tuvieran nada, están exactamente en la misma situación de antes de haber tenido acceso a ellos.
La pobreza se analiza desde dos perspectivas:
·         Cuantitativa (escasez de recursos económicos):
-          Pobreza absoluta (países subdesarrollados): privación de la satisfacción de las necesidades humanas básicas.
-          Pobreza relativa (países desarrollados): inferior a la media de los demás hogares. Diferenciamos dos tipos: leve y severa.
·         Cualitativa (falta de oportunidades para la integración social): el análisis de la pobreza se hace mediante lo que otros te atribuyen (por ejemplo a la hora de acceder a un trabajo si eres marroquí o español).
Al final de la clase empezamos a ver los indicadores de pobreza que existen y que continuaremos viendo en la siguiente sesión.

EL REFERENTE CULTURAL

El referente cultural parte de la idea de que en toda sociedad existe una cultura mayoritaria y otra minoritaria (aunque esto no quiere decir que una sea mejor que otra). También parte de que existen subculturas. Es importante que haya normas dentro de un grupo para considerarlo subcultura ya que todos no pertenecemos al mismo grupo y no hacemos las mismas cosas. En definitiva, para conformar una subcultura hay que tener los mismos principios.
En este referente, existe un conflicto entre la cultura mayoritaria y la minoritaria. Por ejemplo, hay un grupo de catalanes que no se sienten españoles (cultura minoritaria) y los demás españoles (cultura mayoritaria) o hay un grupo de españoles que no se quieren independizar de España (cultura mayoritaria) y otros que si se quieren independizar, la organización ETA (cultura minoritaria).
La cultura mayoritaria no debe excluir a la cultura minoritaria, debe integrar. Conocer es integrar, avanzar es conocer. Un buen ejemplo de ello son los símbolos porque los símbolos tienen el significado que tú le das (no es lo mismo el valor que un  ateo le de a un crucifijo al valor que le de una persona católica). Si hubiera un crucifijo en la clase, deberíamos añadirle otros símbolos que representaran las distintas religiones en las que creen los alumnos. Para así integrar y no retroceder, para poder avanzar.
Por último, hay que resaltar una serie de teorías que surgen a raíz de este referente:
·         Teoría del impacto social (años 20): según dónde nazcas o dónde crezcas serás de una manera u otra. El mismo niño será adaptado si nace en el centro de Sevilla y será desadaptado si nace en las tres mil viviendas.
·         Teoría de la Asociación Diferencial (Sutherland, 1939): dice que no depende del entorno físico sino de las personas con las que te relaciones.
Creo que estas teorías no son del todo ciertas. Me parece extremista. Creo que el impacto social y la asociación diferencial influyen en la desadaptación pero no lo son todo, sólo son un tanto por ciento de la desadaptación pero no la garantiza.
Más recientemente, cultura delincuente/cultura dominante: “la cultura dominante toma las normas de la cultura circundante pero las invierte”. Matza critica esto diciendo que en la adolescencia los comportamientos de invertir las normas son normales ya que son a modo de rebelión o protesta y que ningún colectivo va a realizar ningún comportamiento que le autodestruya.
Estoy de acuerdo con Matza en el sentido de que el proceso de la adolescencia es una etapa evolutiva del ser humano que se caracteriza por esos comportamientos y que no tienen por qué estar propiciados por la intención de invertir las normas.
Este referente me ha recordado especialmente a una película que vimos el año pasado en una asignatura de psicología titulada “la ola” y que va de una banda  de jóvenes con sus propias normas y principios y que se dedicaba a hacer delitos en contra de la sociedad. Tenían un emblema, un saludo e incluso un uniforme que los caracterizaba.

Jaume Funes

Tras la lectura sobre el artículo de Jaume Funes, titulado lecturas inadaptadas sobre los ciudadanos con dificultades sociales, he llegado a la conclusión de que son mucho más complejos los factores que intervienen en la desadaptación de lo que yo pensaba. Con esto me planteo varios interrogantes como si seré capaz y soy aún más consciente de todo lo que me queda por aprender. Estos factores son los siguientes según Funes:
·         Sociedades no adecuadas para resolver problemas y necesidades de determinadas personas. Nos hacen falta sociedades más justas, más permeables y más accesibles.
·         Construcciones problematizadoras de la dificultad: hay personas que depositan en determinados problemas de la sociedad sus propias dificultades de agregación social.
·         Las reacciones incorrectas ya hay veces que damos soluciones a algunos problemas y creamos más marginación de las que pretendemos evitar: consideramos los problemas como patologías (patologización), responder a problemas sociales con el código penal (penalización), proteger a los más débiles sin tenerlos en cuenta y la tendencia a dar respuestas formales sin posicionarnos en el sufrimiento del otro.
·         Las circunstancias problemáticas, hay que hacer un trabajo individualizado en cuando a políticas de exclusión teniendo en cuenta los siguientes factores: clima afectivo básico, vivir en condiciones de desarrollo precarias, estar sometido a altas posibilidades de siniestro y socializarse rodeado de estímulos y modelos educativos. Creo que este es el factor que más determina a la hora de hacer una intervención positiva.
En definitiva, desadaptación social es toda aquella situación en la que existe un desequilibrio entre la sociedad y el individuo, se produce cuando un individuo se separa de la sociedad en algún sentido y no es capaz de, por sí mismo, regresar al puesto en el que se encontraba antes debido a las circunstancias de vida que haya vivido.
Lo que más me ha llamado la atención del texto es que debemos solucionar problemas pero siempre manteniendo los pies en el suelo, esto es, ser conscientes de los recursos con los que contamos y adaptarnos a la realidad. Cuando Funes habla de “renunciar a respuestas que generen más marginación, a pesar de que tengan rentabilidad política inmediata”, desde mi punto de vista, se refiere a eso. Los educadores sociales debemos ayudar pero siendo conscientes y realistas y sabiendo a la perfección con los recursos que contamos. Estoy totalmente de acuerdo y me parece de una importancia vital desarrollar este aspecto en nuestra profesión ya que, si no lo hacemos, estaremos poniendo en riesgo a aquellas personas que necesiten ayuda ya que podemos hacerlas creer que todo va a ser o es color de rosa y la caía puede ser mucho mayor e, incluso, acabar peor de cómo estaban antes de intentar ayudarles.
Para finalizar, me gustaría resaltar algunos ejemplos de situaciones en las que intentamos ayudar a evitar la marginación y sólo conseguimos generar más son los siguientes:
·         Las campañas contra el sida que discriminan más a los afectados en vez de hacer el intento de integrarlos en la sociedad.



·         Campañas preventivas sobre inmigración, homosexualidad, etc porque se le dan más importancia y se ejerce una diferenciación enorme aunque sea inconsciente que lo que propicia es que haya más discriminación.

martes, 18 de octubre de 2011

EL REFERENTE APTITUDINAL

El segundo referente tratado en clase ha sido el referente aptitudinal. Este referente se refiere a las aptitudes y no a las actitudes. Cabe diferenciar éstos dos conceptos: las aptitudes son las características de la persona, sus capacidades y las actitudes es la predisposición que la persona tenga. Aunque son distintas, están íntimamente relacionadas.
Desde el referente aptitudinal, desadaptado es aquel individuo que, por sus capaces, no puede adaptarse completamente a la sociedad. Exactamente, la definición que da Joubrel en 1979 es la siguiente: “sujeto cuyo déficit de salud, inteligencia o transtorno de su afectividad, de su carácter o comportamiento, le priva de insertarse sin ayuda particular en el medio en el que tiene que vivir”.
Esta definición, personalmente, me parece un poco extremista porque creo que el ser desadaptado o no está también en cómo tú te sientas en la sociedad. Por ejemplo, el hecho de tener gafas, es un déficit de salud y yo por el simple hecho de llevar gafas o lentillas no me siento una desadaptada. Sí que es verdad que en un momento dado, cuándo no llevo lentillas o gafas, me puedo llegar a sentir incómoda o hasta un poco débil pero no cómo una desadaptada.
También creo que es cierto que quizás aún no tenga muy claro del todo que es el concepto de desadaptación y que puede que tenga el estereotipo de que ser desadaptada sea algo malo o negativo y puede que no tenga por qué ser así. Por otro lado, me planteo que al igual que con el referente normativo se adquirían normas de manera inconsciente puede ser que sea una desadaptada y no sea consciente de ello, con esto no me refiero sólo al hecho de tener gafas sino a cualquier otro “déficit de salud” que pueda tener cualquier persona. En definitiva, creo que todos podemos ser desadaptados  en algún momento de nuestras vidas.
Supongo y extraigo como conclusión de la clase de hoy, que cada persona tiene que ser capaz de vivir con lo que le toca (estar en silla de ruedas por ejemplo) y hacer todo lo que esté en su mano para hacer vida normal. Por otro lado, creo que es necesario que haya un entorno que los acompañen y una cierta tolerancia por parte del resto de la sociedad (poner rampas para la silla de ruedas por ejemplo). Lo que quiero decir con esto es que estoy de acuerdo en que toda desadaptación es transitoria y relativa y que depende de las características del medio y de las facilidades de adaptación que se le proporciona al individuo.

Otro aspecto importante tratado hoy en clase y que me ha llamado la atención es que no debemos tratar a un grupo de personas que tengan unas características comunes de la misma manera… como educadores sociales debemos hacer un trabajo individualizado ya que las personas antes de categorizarlas por sus aptitudes debemos de examinar el contexto, las situaciones en las que viven, su cultura, su educación, sus capacidades económicas… en definitiva, su historia de vida.
Por último me gustaría hacer una diferenciación propia de los conceptos de “normal”, “diferente” y “desigualdad” enfocados a este referente:
El concepto de normal es muy relativo, según este referente ser normal es no tener ninguna deficiencia de salud, es ser adaptado. Yo creo que normales somos todos, simplemente que unos tienen unas capacidades y otros otras y que hay que ser capaz de convivir con ello.
El concepto de desigualdad implica una clasificación de los sujetos por jerarquía en las que unos están por encima de los otros dependiendo de las capacidades que posean.  Este concepto no facilita la normalización de aquellos que son diferentes o que tienen capacidades diferentes. Por lo tanto, ser diferente, no implica una clasificación o jerarquía y da lugar a la naturalización y a la inserción de los desadaptados a la sociedad.
A raíz de esto se me ocurren dos ejemplos de discriminación ante un déficit de salud que pueden tener que ver con este referente, son los siguientes:
·         En la película de 300, el primer diálogo cuando levantan al niño en brazos y resaltan que sigue vivo porque ha nacido sano, de lo contrario, hubiera sido descartado. Ese descarte considero que es discriminación por un déficit de salud como podría ser haber nacido deforme y que no tienen en cuenta que sigue siendo persona e hijo, sólo tienen en cuenta sus aptitudes.
·         En algunas sociedades, consideran que ser mujer es un déficit de salud y, por eso, las parejas que tienen niñas se deshacen de ellas o las dan en adopción. Esto ocurre en China por ejemplo. Creo que esto también tiene que ver con este referente ya que no tienen en cuenta cómo puede desarrollarse la niña en un futuro y las discriminan, las consideran desadaptadas sin haberles dado la oportunidad a adaptarse siquiera.





EL REFERENTE NORMATIVO

En la tercera EB, y siguiendo con el concepto de exclusión y desadaptación social, vimos el primer referente de cuatro que hay y que veremos en las siguientes sesiones.
Al referente al que me refiero es el normativo (se refiere a normas y no a leyes). Este referente, como su propio nombre indica, es aquel que considera desadaptado a los individuos que se salen de las normas comunes.
Hay que tener en cuenta que para que el individuo tenga una relación satisfactoria con el entorno en que se mueve hay que satisfacerles unas necesidades básicas. Por ello, el principal motivo de que éstos desadaptados no cumplan las normas es que quizás no hayan sido socializados en ellas y, por tanto, no las conocen  ya que todos no tenemos el mismo acceso a los recursos que nos ofrece la sociedad (aunque no las conozcan esto no los exime de cumplirlas).
Nuestro trabajo cómo educadores sociales es ahondar en los motivos y los por qué estas personas no están socializadas o no han podido acceder a estos recursos ofrecidos por la sociedad. Es decir, analizar las normas de funcionamiento de las personas y ser capaces de ver una relación (directa o indirecta) entre su contexto y su comportamiento.
Como he dicho anteriormente, todo el que no cumple las normas se considera que es desadaptado pero yo me planteo ¿desadaptado respecto a quién?, ¿es realmente desadaptado? Creo que este supuesto individuo que no cumple las normas es desadaptado en relación a aquellos que sí las cumplen pero que es totalmente adaptado en su familia y en los contextos en los que haya personas que no han podido aprender estas normas.
Por último, cabe destacar que, según este referente, así como el que no se adapta a la norma social es un desadaptado, aquel que intenta adaptarse a la norma general se le considera mayoritariamente aceptado, un adaptado social.
Como conclusión me gustaría señalar que a este referente le veo una gran utilidad para nuestro trabajo ya que nos ayudará a poder llegar al centro del asunto y averiguar por qué cada persona tiene un comportamiento distinto y por qué se salta ciertas normas sociales. Hay que analizar, por tanto, el contexto en el que se desarrollan los individuos y los agentes socializadores que les rodean (familia, escuela, grupo de iguales, mundo laboral…) así como sus diferentes actitudes ante la sociedad: adaptación a normas, adaptación comportamental, participación activa en la sociedad, interiorización de valores, normas y símbolos, pertenencia social etc

domingo, 9 de octubre de 2011

INADAPTACIÓN Y DESADAPTACIÓN

La segunda EB de Intervención comenzó con la visión de unas fotografías representadas a modo de collage, en las que todas las fotos estaban a color menos una. El profesor nos preguntó que quién de esas personas creíamos que estaba desadaptada y contestamos que los mendigos (los de la foto en blanco y negro). A sorpresa nuestra los mendigos, no eran unos mendigos normales, se hacían llamar los vagos mendigos y especificaban para qué pedían dinero sinceramente… para drogar, para alcohol, para comer… ¡incluso tenían una página web desde la que se podían hacer donativos!
Esto nos hizo darnos cuenta de la gran influencia que tienen los prejuicios y los estereotipos sobre nuestra percepción sobre las cosas, las personas y las situaciones. Debemos de pasar la línea de lo superficial e ir más allá para saber si una persona es desadaptada o no, estos mendigos, parecían a simple vista desadaptados pero resultaba al final que eran famosos y los conocían muchísima gente e incluso de hacía mención a  ellos en un libro policiaco.
Nuestra visión de la realidad la contagiaremos a los demás según los estereotipos que tengamos. Los educadores sociales debemos hacer desaparecer estos estereotipos y ser capaces de ir más allá de ellos.
 La educación social se divide en tres partes: animación sociocultural, educación de adultos y educación especializada. El profesor nos recalcó que lo que daremos en esta asignatura pertenecerá a la última parte, la de educación especializada. Por lo tanto, la diferencia entre inadaptación y desadaptación pertenecerá a esta parte, así como, todo lo que aprendamos de aquí en adelante.
·         La inadaptación es una situación permanente y depende del individuo.
·         La desadaptación es una situación transitoria que depende del individuo y del medio en el que se desarrolle.
Vi esto, al principio, como algo muy relativo porque dependiendo de por dónde se mire algunas personas pueden estar adaptadas en un lugar y desadaptadas en otros (depende del agente de socialización y del contexto). A medida que iba transcurriendo la clase, lo fui comprendiendo gracias al debate y a los diversos ejemplos que ponían el profesor y mis compañeros y me quedó por fin claro los conceptos de desadaptación y de inadaptación, que aunque los utilicemos indistintamente, siempre nos referiremos al significado de desadaptación ya que como educadores sociales siempre habrá  una solución y una manera de intervenir en el problema.

¿QUÉ ES LA EXCLUSIÓN?


 Por fin llegó la primera clase de Intervención, la verdad es que es una asignatura que me tenía bastante intrigada y que me parecía interesante aún sin haberla conocido todavía y sin saber de lo que iba. Tras la primera EPD y tras haberle echado un vistazo al temario,  descubrí que me llamaba mucho la atención y que tenía ganas de dar la primera clase. Esta primera clase no me defraudó y me hizo reflexionar bastante, consistió en lo siguiente:
Para dar inicio a la clase, la profesora nos puso un vídeo (que adjunto a continuación) del que pudimos extraer conclusiones muy interesantes y que nos hizo reflexionar mucho sobre la exclusión.
Del vídeo adjunto sacamos en conclusión que lo realmente importante es cómo tú te veas y no como te vean los demás. El cordero, en un principio se dejó llevar por lo que los demás pensaban cuando lo vieron esquilado en lugar de estar seguro sí mismo y saber quién era realmente, teniendo lana o sin tenerla. Esto se lo hizo ver el conejílope, con su papel de educador social, le hizo ver que la manera en que lo trataban los demás era algo sólo superficial y que su mente era la que no debía ser cruel con él mismo para que así los demás tampoco lo fuesen.
Debemos ponernos en el lugar de todos los personajes del vídeo, hay que tener en cuenta que todos podemos llegar a ser corderos (personas excluidas), topos (personas que excluyen) y conejílopes (educadores sociales). Como futuros educadores sociales, nuestra labor es la de reforzar las capacidades de todos los corderos, mostrarle otras posibilidades, motivarlos, adaptarlos al cambio, asimilación de hechos, etc
Como consecuencia del vídeo, cabe resaltar la conciencia de los topos cuando el conejílope los mira y se esconden, también somos muchas veces topos y no aprendemos a empatizar y a ponernos en el lugar del otro, comportamientos que debemos corregir como futuros educadores sociales.
Este debate en clase sobre el vídeo, derivó en establecer una definición de qué es la exclusión. Llegamos a la conclusión de que en nuestra sociedad, en el siglo XXI, nosotros mismos somos los que determinamos nuestra exclusión ya que sabemos perfectamente qué decir, cuándo decirlo y delante de quién.
Hay que aprender, por tanto, a discernir entre lo que es positivo para los demás y lo que es negativo. No es igual de importante, por ejemplo, la opinión de Obama sobre los homosexuales que un maremoto en Flipinas dónde han muerto 5000 personas. No dejamos de ser borregos de la sociedad, tenemos que esperar a que un político de su opinión sobre un tema para decidirnos nosotros también a darla, esta es la tolerancia del siglo XXI y es precisamente lo que debemos cambiar como educadores sociales.
 Para finalizar, la profesora puso un par de ejemplos para hacernos ver que debemos desaprender lo aprendido, debemos llegar a las causas, ir más allá del problema y ahondar en él lo máximo posible. Uno de los ejemplos sería el siguiente:
·         Imaginemos que nos toca trabajar con el Cuco en el caso de Marta del Castillo, nosotros, cómo educadores sociales, debemos averiguar las causas de por qué se comporta así y si no sabe comportarse de otra manera.
Debo decir que en esta clase no me quedó del todo claro el concepto de exclusión social pero espero ir descubriéndolo poco a poco.